martes, 20 de marzo de 2012

La atracción de la persona

No. No es que me considere una persona atractiva ni que aquellos que trabajamos en la "gaso" tengamos un don especial, pero creo que somos como un iman para algunos conductores.

Os pongo en antecedentes: 18 surtidores, la inmensa mayoría de ellos vacíos, y tú limpiando, por ejemplo, el nº 8. A lo lejos viene un coche y tu pensando: "No. Están todos los demás libres. No se va a poner aquí, justamente donde yo estoy limpiando". Pues es en ese momento donde surge nuestro "PODER MAGNÉTICO". Allí van como una flecha. Haciendo incluso un poco de maniobra para enfilar bien la calle. Aquello parece un duelo de titanes, como en las películas del oeste, sólo que tu como armas: el cubo y la bayeta y él con su coche. Sólo falta la canción de "La muerte tenía un precio" de Ennio Morricone.

Al principio pensé que únicamente se trataba de una coincidencia, pero no. Lo tengo comprobado. Cada vez que salgo a limpiar, saco el imán personal y allí aparece alguien por la retaguardia. ¡Ya te vale, colega!!!

4 comentarios:

  1. Eso es para ver si nos echas gasolina.

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  2. Y un cuerno. Jajaja Que es autoservicio y lo pone bien claro. Pero eso de no saber leer los carteles vendrá otro día.

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  3. Bienvenida al mundo bloguero, CR. Ya tienes una fiel seguidora de tus historias. Y espero que te ahorres mucho en sicólogo mientras escribes por aquí.
    Será divertido leer tus aventuras y desventuras. Te enlazo en mi blog, que no me quiero perder nada de nada.

    Un abrazo enorme

    MARTA ORTIZ

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    1. Gracias Marta. Yo ya me suelo pasar por el tuyo. Por cierto, tengo un par de bodas en verano. ¿Tienes alguna postal para ese tipo de eventos? Te mandaré un e- mail.

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